Mármoles Puente
Debido a la contingencia sanitaria diversas industrias han tenido que minimizar o parar sus procesos productivos. Uno de los sectores más afectados es el del interiorismo, ya que los proyectos de construcción y remodelación se encuentran detenidos.
Desde la perspectiva de Miguel Ángel Puente, subdirector comercial de Mármoles Puente, esta crisis pasará y lo más importante es que las empresas del sector se unan para salir juntas adelante. Así mismo, el experto prevé que la industria se reactivará de la mano del turismo, pues los restaurantes y hoteles pronto volverán a poner en marcha sus proyectos.
Otra ventana de oportunidad para reactivar las actividades de la industria se abre con la industria son con este tipo de plataformas donde las empresas pueden darse a conocer, atraer negocios B2B y generar oportunidades muy valiosas.
“Nosotros hemos participado durante 8 años en Habitat y nuestra experiencia ha sido muy positiva. En este tiempo hemos generado contactos y cerrado negocios con clientes de alto nivel, de hecho algunos de nuestros proyectos más importantes han sido una casa habitación de lujo en Chiapas y un Hospital en Piedras Negras. Así mismo Habitat nos dio la oportunidad de conectar con nuevos clientes que no conocían la empresa y abrirnos más al sector del interiorismo, que ahora tiene un gran valor para nosotros”, relató el experto.
Además Habitat ha permitido al equipo de Mármoles Puente aprender cada vez más de la industria y vivir experiencias únicas. De acuerdo con Miguel Puente, una de las mejores experiencias fue el proyecto de interioristas emergentes. En aquella ocasión tuvieron la oportunidad de colaborar Erika Winters para diseñar un espacio. Desde entonces han forjado una estrecha amistad que los ha llevado a realizar algunos proyectos más en conjunto.
Sin embargo, para tener éxito con este tipo de plataformas se necesita más que participar con un stand. Actualmente las empresas que se mueven en el sector del interiorismo deben enfrentar un gran reto, pues los clientes cada vez están más preparados, poseen mayor información y por lo tanto son exigentes. Para poder satisfacer las necesidades de los clientes, las empresas deben contar con un equipo de venta bien capacitado para responder dudas, ofrecer las mejores soluciones y trabajar de la mano con el cliente.
Además, el nivel de competencia es diferente, pues cada vez hay más empresas que también cuentan con mayor capacitación. La oferta hace que los clientes se vuelvan más exigentes, lo que lleva a las corporaciones a balancear la cuestión de desarrollar procesos más sofisticados a la vez que mantienen precios competitivos.
